La historia es conmovedora, uno no puede evitar identificarse a veces con un personaje y a veces con otro, cuando se deja llevar por la apatía, por la codicia, por la ingenuidad. Es un libro corto pero efectivo, que deja claro que nunca nos debemos dejar llevar por lo que otros dicen, especialmente cuando ellos están en el poder. No debemos ser ovejas que siguen ciegamente al pastor, no debemos ser sordos y apáticos a las injusticias sociales, no debemos limitarnos a nuestro pequeño mundo, sino que debemos tener una visión amplia de lo que pasa a nuestro alrededor.
Como nota al margen, me agrada recordar que empecé a leer Animal Farm en Shakespeare Books and Co, en una version viejisima en inglés. Esto no tiene mayor importancia, pero le da cierto aire especial pues desde el primer momento supe que era un libro que sobresale del resto, y la imagen que tengo de la escena espero que siempre quede grabada en mi memoria.
En fin. Recomendadísimo.